¿Cómo se beneficio Japón de la Primera Guerra Mundial?
Japón participó en la Primera Guerra Mundial desde 1914 a 1918, aliada a la Triple Entente y desempeñó un papel importante en la protección de las rutas marítimas en la zona occidental del océano Pacífico y en el Índico frente a la Marina Imperial alemana.
¿Cómo se logro modernizarse Japón?
En Japón, la revolución de 1867 inició un rápido proceso de occidentalización y modernización que, en el curso de treinta años, hizo del país una [potencia militar#CONTEXTOS#3088,8652] de primer orden -evidenciada ya por su victoria sobre Rusia en la guerra de 1904-05- y un importante poder industrial y comercial.
¿Cuáles fueron las consecuencias positivas del imperialismo?
Las consecuencias positivas del Imperialismo tuvieron lugar principalmente en los países europeos, que tenían unas enormes ansias de enriquecimiento y llevaron a cabo una política expansionista con el fin de conseguir su propio beneficio.
¿Cuáles fueron las principales consecuencias de la expansión imperialista en el siglo XIX?
Otro dato que cabe destacar fue un enorme crecimiento de la población que tuvo lugar en Europa en el siglo XIX, conocido como la “explosión blanca”, que generó un importante flujo migratorio, y esto contribuyó a un desarrollo de la expansión imperialista, ya que la población que emigraba contaba con territorios coloniales en los que asentarse.
¿Por qué los japoneses derrotaron a los europeos en la Primera Guerra Mundial?
Los japoneses decidieron asestar el primer golpe y, por primera vez desde la Edad Media, los no europeos derrotaron a los europeos en una guerra de gran envergadura. Por el tratado de paz firmado en 1905, los japoneses no sólo obtuvieron la dominación de Corea, sino de Manchuria del Sur, región importante por sus recursos económicos.
¿Cuáles fueron las causas del temor a la inmigración japonesa?
Este temor se manifestó especialmente en los Estados Unidos, donde se prohibió la inmigración japonesa y donde la venta de productos japoneses encontró muchos obstáculos. Pero el Japón necesitaba, a toda costa, salidas para una población excesivamente numerosa, por lo que colonizó Corea y aceleró la infiltración de elementos nipones en Manchuria.