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¿Qué son los bares sin alcohol?
En este contexto de tendencias, han nacido los bares sin alcohol o «sober bars». Espacios decorados igual que los antros más trendy, con música alta, grupos de amigos, flirteos, risas, baile y consumo de bebidas, en este caso, cero etílicas. De ahí los sober bars. El principal motivo: tener una vida más saludable.
¿Qué son los bares sin alcohol o Sober Bars cuándo y dónde surgieron?
Las barras sin alcohol no son un concepto nuevo. A finales del siglo XIX, una serie de bares sin alcohol conocidos como barras de templanza se establecieron en Reino Unido a raíz del movimiento por la templanza o temperancia, que abogaba por no consumir alcohol.
¿Qué bebida alcoholica prefieren los Millennials?
Preferencias en bebidas Alrededor del 27\% de los millennials mayores de edad escogen tomar cerveza al cenar fuera, 26\% vino y 24\% otros licores (whisky, vodka, ron, etc.)
¿Que eran los speakeasy?
Speakeasy era el nombre con el que se conocía a los establecimientos que vendía nde manera ilegal bebidas alcohólicas durante el periodo histórico de Estados Unidos (y Canadá) conocido como Prohibición o Ley Seca (1920–1932).
¿Por qué los días sin alcohol son tan saludables?
Además, los días sin alcohol le dan un bienvenido respiro al hígado, el órgano que metaboliza esta sustancia. La iniciativa se dirige en especial a las personas que tienen entre 45 y 65 años, el grupo de población que suele sobrepasar los límites compatibles con una vida saludable, según indican las estadísticas.
¿Por qué es importante beber en los bares?
Desde la manera en que usamos el lenguaje para dar a entender que beber es importante para obtener aceptación social hasta la costumbre de mezclar rondas de cerveza con planes infantiles en los bares, existe toda una plétora de costumbres que han quedado obsoletas y deberíamos revisar.
¿Cómo afecta el alcohol a nuestras vidas?
Además, disminuye la concentración de factores que estimulan el crecimiento del cáncer, así como el riesgo de que aparezcan enfermedades metabólicas como la diabetes tipo 2 e hígado graso. Asumido el reto de poner a raya el alcohol en nuestras vidas, el camino no resulta fácil.