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¿Qué pasa si no pago tarjeta de crédito y me voy del país?
En este caso, venderán tu cuenta a un buró que compra cuentas de alto riesgo y ellos se encargarán de estar pendientes por si algún día regresas. Desde el momento que caes en mora serás reportado al Buró de Crédito como «mala paga» y no podrías prestar dinero prácticamente nunca en el país que dejaste dichas deudas.
¿Qué pasa si tengo una deuda con el banco y me voy del país?
Si le debés al banco y no podés pagar, en algunos casos, la entidad financiera puede trabar un embargo judicial. Esto ocurre cuando el banco no puede saldar tu deuda de otra forma. Si acumulás muchas cuotas vencidas, se generarán intereses sobre la deuda y la misma puede derivar en un proceso judicial.
¿Cómo cobrar las deudas de una tarjeta de crédito?
Para poder cobrar estas deudas el acreedor debe realizar un juicio ordinario. Este tipo de proceso lleva tiempo y debe probarse cada deuda. Es un trámite muy costoso para el acreedor y que puede no tener un resultado favorable. Es por esto que las empresas de tarjetas de crédito no hacen prácticamente juicios para cobrar las deudas.
¿Qué pasa si no liquido la deuda de mi tarjeta de crédito?
Conforme pasa el tiempo, en caso de no liquidarse por completo la deuda, se añadirán intereses y comisiones que a largo plazo serán muy complicados de pagar. ¿Tienes una deuda de tarjeta de crédito y temes por tus bienes?
¿Por qué tener deudas bancarias no nos impide viajar al extranjero?
Obviamente, desde la posición de un deudor, cuestiones como los viajes con retorno no aportan ningún tipo de problema más allá de los personales que le pueda suponer, es decir, tener deudas bancarias no nos impide viajar al extranjero, otra cuestión ya puede ser el hecho de plantearse la residencia en un país extranjero manteniendo deudas
¿Qué supone este cambio en la prescripción de la deuda de una tarjeta de crédito?
¿Qué supone este cambio en la prescripción de la deuda de una tarjeta de crédito? Conclusión: Actualmente el plazo de prescripción de la deuda de una tarjeta de crédito es de cinco años contados desde que pueda exigirse el cumplimiento de la obligación.