¿Qué hacer cuando llega la separación con hijos sin estar casados?
Cuando llega la separación con hijos sin estar casados, y son menores de edad, lo mejor es acudir a un procedimiento judicial, para establecer los términos en los que se va a producir la separación. Hay que tener claro que en la Ley de Enjuiciamiento Civil no se hacen diferencias entre los hijos nacidos en el matrimonio y fuera de él.
¿Es posible ser pareja de alguien que tiene hijos?
Aunque esto diste por completo de la realidad, ser pareja de alguien que tiene hijos no es una situación sencilla. No por los hijos mismos, sino porque no es lo mismo entablar un romance con alguien libre de compromiso que con alguien que lo tiene y lo tendrá de por vida.
¿Cuáles son los requisitos para tener una pareja de hecho?
Haber convivido durante los últimos 5 años antes de la muerte de uno de los miembros de la unión. Que la pareja de hecho lleve inscrita en el registro oficial, o por medio de documento público, al menos durante los dos años anteriores al fallecimiento.
¿Cómo estar con alguien que tiene hijos?
Estar con alguien que tiene hijos no es cualquier cosa. Debes estar muy consciente de ello. Tienes que tener presente —todo el tiempo— que no puedes ir y venir como si se tratara de un juego. La estabilidad emocional de los pequeños está de por medio, mucho más cuando entablas lazos de cariño con ellos. Debes darles su lugar, siempre.
¿Qué pasa si una persona no se divorcia y vive con otra?
De hecho si una persona no se divorcia y vive con otra, se considera legalmente adúltero y solo la legítima esposa o esposo tiene derechos sobre los bienes.
¿Por qué comprar una residencia habitual en separación de bienes?
En caso de comprar una residencia habitual en separación de bienes, si a alguno de los dos miembros de la pareja le va mal un negocio o se endeuda, esta tan solo afectaría a su patrimonio personal. Da una mayor seguridad al patrimonio familiar que el régimen ganancial.
¿Cuáles son los bienes adquiridos antes y después del matrimonio?
Es decir, que todos los bienes adquiridos antes y después del matrimonio, y también las donaciones y herencias seguirán perteneciendo a cada uno de forma individual. El propietario podrá disponer, administrar y disfrutar libremente de sus bienes, independientemente de su cónyuge.