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¿Por qué se dan las peleas entre hermanos?
Las razones que llevan a los hermanos a pelear pueden ir desde querer el mismo juguete a necesitar más atención. Según los expertos, la mayoría de hermanos y hermanas experimentan cierto grado de celos y competitividad que pueden fácilmente acabar en disputa.
¿Qué hacer cuando hay rivalidad entre hermanos?
Toma las medidas necesarias para fomentar las relaciones saludables entre hermanos:
- Respeta las necesidades específicas de cada hijo.
- Evita las comparaciones.
- Establece reglas básicas.
- No te metas en las peleas.
- Anticípate a los problemas.
- Escucha a tus hijos.
- Fomenta el buen comportamiento.
- Muestra el amor que sientes.
¿Qué origina una pelea?
La principal causa de las discusiones y peleas casi siempre es la misma, y más si se deriva en el agravio y en esos conflictos vacíos de sentido, pero llenos de desprecio y orgullo. Durante un momento, pensemos en la última vez que mantuvimos una discusión más o menos acalorada.
¿Por qué los hermanos están peleando?
En edades tempranas, puede ocurrir que los hermanos estén continuamente peleándose porque busquen la atención de los padres. Generalmente, suelen ser rabietas que no llegan a más, pero en otras ocasiones, la relación puede llegar a ser conflictiva, pues la acumulación de conflictos puede generar conflictos mayores. 3. Comparaciones de los padres
¿Por qué los hermanos dejen de hablarse?
En la edad adulta, puede ocurrir que los hermanos dejen de hablarse por distintos motivos económicos. Algunos hermanos se pelean porque comparten una empresa, y cuando llegan los problemas de liquidez, la relación se ve afectada. Otros, en cambio, experimentan una pelea patrimonial (en especial, por las herencias).
¿Por qué hay conflictos entre hermanos?
A veces es por una herencia, otras porque no se supera la muerte de los padres o cuesta admitir que son dependientes. A partir de los 50 años, los conflictos entre hermanos son más frecuentes.
¿Cuáles son las relaciones complicadas entre hermanos?
Las relaciones complicadas entre hermanos pueden llegar a ser ser muy intensas y generar situaciones en las que la hostilidad, la rivalidad, la competitividad, los celos y, en ocasiones el odio pueden manifestarse.