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¿Es posible comprar un vehículo a un particular o en un concesionario?
Si te has comprado -o te vas a comprar- un vehículo de este tipo, una de las primeras dudas que te asaltan es la de si adquirirlo a un particular o, por el contrario, hacerlo en un concesionario. ¿Qué ventajas y qué inconvenientes presenta cada opción? Existen cuatro puntos clave que debemos tener en cuenta para tomar la decisión correcta:
¿Cuáles son las ventajas y inconvenientes de comprar un coche a un concesionario?
Vender un coche a un concesionario o a un particular tiene sus ventajas e inconvenientes, los cuales tendrás que evaluar en relación a tus necesidades y perspectivas de venta. Un concesionario podrá financiarte mejor la compra de un coche nuevo mientras que a un particular te ofrece la posibilidad de decidir cómo y cuándo quieres la venta.
¿Cuál es la diferencia entre compra-venta entre particulares y concesionarios?
Mientras que los concesionarios están obligados a dar una garantía de 6 meses -aunque es habitual que ésta sea de 1 año-, la compra-venta entre particulares se basa en el Código Civil, que solamente obliga al vendedor a entregar el automóvil sin cargas, gravámenes o vicios ocultos.
¿Qué es un concesionario de coches?
Los particulares que acuden a concesionarios de compraventa buscan, en su mayoría, vender sus coches de segunda de mano para conseguir descuento en la compra de uno nuevo. Pero ¿qué ventajas supone esto? ¿Qué es un concesionario de coches?
¿Quién puede comprar un coche de segunda mano?
Un familiar, un amigo… en principio, siempre será más fiable comprar el vehículo a alguien conocido: al menos, si hay problemas posteriores, podrás localizarlo… Si vas a un concesionario, todo el papeleo necesario a la hora de realizar la compra-venta de un coche de segunda mano corre a cargo de ellos.
¿Cuáles son las precauciones antes de comprar un coche?
Además, antes de la compra del vehículo deberás tomar precauciones. Solicita el Informe DGT para asegurarte de que el coche no tiene ningún impedimento para realizar el cambio de nombre. De lo contrario, puedes encontrarte con un grave problema, sin poder hacer el cambio de titularidad y ya habiendo comprado el vehículo.